La conservación del patrimonio en la Cofradía de Jesús es una función trascendental que se ha llevado a cabo en la misma durante siglos, gracias a la cual es posible la existencia de un patrimonio cofrade único, especialmente el escultórico, clave en la historia del Barroco en España, pero también de otra índole, tanto material como inmaterial.
La fundación del Museo Salzillo en el año 1941 vino a consolidar esta función primordial para la persistencia para el futuro de un legado único ligado a la identidad de Murcia. La Cofradía de Jesús fue fundada en el año 1600 en torno a la venerada imagen de Nuestro Padre Jesús, un enigmático Nazareno que sale en procesión cada mañana de Viernes Santo. A partir de la segunda mitad del siglo XVIII, el gran escultor Francisco Salzillo renovó el patrimonio escultórico con sus famosos pasos sobre la Pasión de Cristo realizados entre 1752 y 1777, obras cumbre del Barroco español.
Uno de los mayores riesgos en la conservación de los bienes culturales se encuentra en la negligencia humana, especialmente debida a una mala manipulación de los mismos. Los bienes culturales que forman parte del patrimonio de esta cofradía son manipulados por sus camareros, que se encargan de preparar los pasos procesionales para la procesión de la mañana de Viernes Santo, coordinados por el Comisario de Pasos y Patrimonio de la Cofradía, en la actualidad Francisco Enrique Pedrero Guzmán; por la conservadora de la Cofradía, que desde hace casi veinte años es María Amparo Muñoz Fernández; así como por los técnicos del Museo Salzillo, que se encargan de la supervisión diaria de los mismos. El llamado equipo de procesión, coordinados por el sacristán de la cofradía, y a su vez por el Comisario de Pasos y Patrimonio, hacen posible, junto a los miles de cofrades, mayordomos y estantes, que la mañana de Viernes Santo, o la “Mañana de Salzillo”, se haga una realidad año tras año.
El mismo Francisco Salzillo fue uno de los primeros camareros de la Cofradía. Las primeras, en puridad, serían las monjas agustinas que desde 1687 se hacían cargo de la imagen del Titular, Nuestro Padre Jesús, y más delante del adecentamiento de los pasos del Prendimiento y de Jesús en la Columna.
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